JC Decaux lamenta el ‘excesivo vandalismo’ con las bicis en Sevilla
El responsable de Sevici de JC Decaux defiende que el alquiler de bicis debe ser un complemento al bus o al futuro Metro, ya que no es «infalible».
–Existen ya 236 de las 250 estaciones de Sevici pactadas. ¿Cuáles son los últimos datos de uso?
–Hasta el 16 de febrero, existen 108.340 abonados de corta y larga duración. La utilización entre semana es de una media de 26.000 usos al día y entre 15.000 y 16.000, los fines de semana. Desde el 24 de julio de 2007 se registraron cinco millones de usos.
–¿Podría morir de éxito?
–Los datos son absolutamente positivos, aunque hay un problema de vandalismo excesivo. Va a más y se demuestra que funciona. En algunos momentos hay 1.500 bicis en movimiento, pero funciona bien. La media es de 12 usos por bicicleta al día.
–¿Cuántas reparaciones se realizan?
–Cada día en la calle se reparan más de 150 pinchazos, cadenas… y unas 250 bicicletas se arreglan en el taller a la semana. Si no se reparase ninguna en diez días no quedaría ni una bicicleta operativa en la ciudad. El servicio de reparación funciona.
–¿A qué se deben tantas incidencias?
–El 40% de las averías son pinchazos y el 24%, rotura o salida de la cadena. Es decir, que el 64% de las averías las inhabilitan.
–¿Son fruto del vandalismo o de la calidad de las bicis?
–En otras ciudades el número de pinchazos es menor. Un porcentaje alto de averías es fruto del vandalismo. Por ejemplo, se registran muchos puños robados, cestas destrozadas, además de pinchazos, cadenas rotas…
–¿Se prevé cerrar las estaciones por la noche?
–No se baraja, en principio.
–¿En principio?
–Cada vez se cuidan más las bicis. Lo ideal es que la gente denuncie el vandalismo, que haya colaboración ciudadana. Además, no hay que olvidar que es un servicio complementario al servicio público. No es infalible. Si no hay bici en una estación por el uso masivo, habrá que coger el autobús o el Metro, cuando funcione.
–¿Tanto les ha sorprendido el vandalismo en Sevilla? En Lyon ya se daban muchos casos.
–En roturas sí es exagerado en Sevilla, en robo no tanto. En casi dos años han desaparecido 230 bicis y no es mucho comparado con otras ciudades. El problema es el vandalismo. Empezamos muy bien, pero se disparó el vandalismo cuando las estaciones llegaron a zonas más alejadas del Centro. Espero que se estabilice y se conciencie la población.
–¿Se pondrán cámaras para luchar contra el vandalismo?
–Es muy complicado. Se podría estudiar su colocación en algunas estaciones más vandalizadas, pero este asunto está muy verde y no sería para todas las estaciones. El coste sería importante.
–¿Se va a limitar el número de asociados?
–No lo hemos valorado nosotros. No ha salido de nosotros esa idea. Lo que está claro es que cuando se implanten las dos últimas estaciones, en la Plaza Nueva, el Ayuntamiento y la empresa dejaremos pasar unos meses y, tras la estabilización del sistema, se tomarán decisiones de forma conjunta.
–¿Se prevé ampliar la red?
–Estaremos unos meses estudiando los datos de uso cuando se estabilice el servicio y ya veremos.
–¿Cuándo subirá el abono?
–No se ha cerrado nada. Diez euros dan para cubrir poco. En otras ciudades, el precio es más elevado y el pliego de condiciones del contrato recoge que a los dos años se actualizarán los precios.
–¿Se quitará la primera media hora gratis?
–No, no se hará.
–¿Llegará a 30 euros al año?
–No descartamos nada. Es lo que se paga en Barcelona, pero no creo que llegue a tanto. Dependerá de los estudios y del acuerdo con el Ayuntamiento. Diez euros es una cifra muy baja.
–¿Le salen las cuentas a JC Decaux?
–Con los abonos a 10 euros al año no es rentable por el coste de la inversión y explotación, sobre todo por el vandalismo, pero es una inversión a largo plazo. Será rentable a los 15 años.
–La crisis ha reducido espectacularmente los ingresos por publicidad.
–El negocio se basa en la publicidad y la crisis se nota, pero para JC Decaux, Sevilla es muy importante y no dejará de prestar el servicio ni lo cambiará por ello. Hoy día no es rentable, pero se sabía que sería así. Esto pasará.
Fuente: El Correo de Andalucía / Nicol Jimenez