La Oficina de la Bicicleta ya eliminada tenía un coste laboral de un millón al año
La Oficina de la Bicicleta de Sevilla funcionaba con un presupuesto fijo de un millón de euros con el que se pagaba el sueldo de los 18 funcionarios adscritos a este servicio de la Gerencia de Urbanismo. El reciente desmantelamiento de este organismo por parte del gobierno del PP, adelantado por este periódico el pasado 6 de agosto, no ha supuesto ahorro económico aunque tal ha sido la causa oficial que se expuso a los trabajadores.
Y no ha habido ahorro porque los 18 funcionarios adscritos siguen contratados en la Gerencia, aunque dispersados y repartidos por otros servicios. El cambio, pues, ha consistido en acabar con la Oficina creada por Izquierda Unida, uno de sus principales proyectos estrella de los dos últimos mandatos municipales, y en reducir al máximo el personal que, a partir de ahora, se dedicará tan sólo a continuar las obras del carril bici. Las 18 personas que antes trabajaban en la Oficina de la Bicicleta han quedado reducidas a cuatro personas adscritas ahora al departamento de Obras y Proyectos de la Gerencia de Urbanismo, el servicio que hereda lo que fue la oficina.
El único ahorro en sueldo que ha logrado el PP ha sido por rebajar a técnico base de la Gerencia al que era jefe de servicio de la oficina que sustituyó a Pepa García Jaén cuando ésta fue destituida por orden de Antonio Rodrigo Torrijos. Y tampoco hay tal ahorro porque ahora se presenta un nuevo gasto salarial tras la sentencia judicial que obliga a Urbanismo a otorgar a Pepa García Jaén un puesto acorde a su categoría de técnico superior, con contenido y funciones específicas.
Aparte de los sueldos, el presupuesto de la Oficina de la Bicicleta dependía cada año de las obras, proyectos y eventos que gestionaba. Desde 2006 hasta 2011 gestionó en obras 36 millones, que se han invertido en la construcción de la red de 120 kilómetros de carril bici. Esta cifra resulta de sumar los 18 millones que costaron los primeros 77 kilómetros de carriles bici (la obra se inició en 2006 y se acabó en 2008), los 14 millones del Plan estatal 8.000 que permitirieron ampliar la red hasta los 120 kilómetros; los 1,90 millones que se destinaron del Plan Urban del Polígono Sur a un carril bici por esta zona, y los 2,2 millones que se gastaron en 2011 (antes de las elecciones) en mejorar la seguridad del carril bici y acabar con sus puntos negros.
Las demás funciones que tenía encomendadas la Oficina de la Bicicleta quedan en el aire. La gestión y control del servicio público de alquiler de bicis (Sevici) parece que dejará de hacerse desde Urbanismo. El gobierno local ya ha dicho estos días que quiere ofrecer el servicio de Sevici para las rutas turísticas y que va a intentar negociar el asunto con la multinacional JCDecaux estos días en Madrid, aprovechando el viaje del alcalde para el encuentro con el Papa. Lo más probable, pues, es que se vincule el control de este servicio de alquiler de bicis a la Concejalía de Turismo.
Desde IU se recalca que esta medida no tiene sentido porque el uso turístico de las bicis públicas de alquiler siempre ha sido muy bajo en comparación al resto de abonados anuales. La asamblea ciclista A Contramano dice que Sevici debe ser para todos los vecinos, no sólo para turistas.
Fuente: Diario de Sevilla